20 de septiembre de 2013

LA QUINTA COLUMNA, UNA CATEGORÍA...

Por: Carlos Hermoso

La expresión quintacolumna nace en uno de los episodios de la historia universal más conmovedores. Al inicio de la Guerra Civil española, el general Mola -uno de los principales protagonistas del golpe de Estado de julio de 1936 contra la República española- acuña la expresión cuando:

... Mola, “el Director”, fue el encargado de planificar la táctica del golpe y el que estableció el plan a seguir. Durante la 1ª fase de la Guerra Civil, cuando los sublevados avanzaban hacia la capital en agosto de 1936, Mola fue entrevistado por un periodista. Éste le preguntó cuál de sus cuatro columnas entraría primero en Madrid a lo que el general respondió de la siguiente manera: “Lo hará una quinta que ya está dentro de la capital”. Se refería a parte de la población madrileña simpatizante con el golpe y de la que esperaba trabajasen clandestinamente por la victoria de los sublevados. Sus intervenciones fueron variadas: difusión de información para minar la moral de la población y así facilitar la entrada de los insurrectos, recopilación de informes sobre cuestiones militares o la dotación de asilo a represaliados y perseguidos o confección de planes de huida hacia la zona “nacional”.

La fuerza semántica del término, por tanto, proviene de un hecho histórico cuya dimensión trágica y sublime para el movimiento comunista internacional se ha expresado en todas las manifestaciones artísticas. En la música toda, en sus himnos y canciones. En la pintura, entre las que destaca el Guernica de Picasso. En el cine. En general, la cultura universal se vio enriquecida con la obra inspirada en la Guerra Civil. La pasión desbordada como la plasma Hemingway en su gran obra Por quiên doblan las campanas, acompañada, entre muchas otras, por Soldados de Salamina, La lengua de las mariposas de Manuel Rivas, bello cuento llevado a la pantalla en una cinta dirigida por José Luis Cuerda. La poesía -donde destaca Miguel Hernández, acompañado por Alberti, Vallejo, entre otros- deja una impronta en la cultura universal.

En fin, la Guerra Civil española es un episodio que debía dejar profunda huella en el mundo entero en lo artístico tanto como en lo político e ideológico. Las controversias sobre este hecho histórico no cesan, se avivan. Menos la referencia hacia la deleznable conducta de los quintacolumnistas, solo reivindicada por reaccionarios de todo tipo.

La fuerza semántica que van a adquirir algunas palabras durante la Guerra Civil Española es el resultado de la magnitud de la contienda cuando las grandes aspiraciones redentoras, revolucionarias y libertarias del pueblo español se ven frustradas por la criminal acción del fascismo español e internacional, junto a la Alemania nazi y el fascio italiano. Del lado republicano y revolucionario, las brigadas internacionales expresan la solidaridad de los pueblos del mundo en su máxima expresión.

De esta manera se acuñan palabras cuyo uso en las consignas y la jerga cotidiana va a convertirlas en categorías, esto es, palabras que van a integrar, cada una de ellas, nociones abstractas en que se encuentra organizada la realidad. En el caso de la España convulsionada por la guerra fueron muchos los términos que alcanzan tal dimensión. Estas categorías y su contenido saltan las fronteras de España y se difunden por el mundo entero, se internacionalizan, adquieren vida más allá de España. Mientras, en medio del conflicto, acusar a alguien de “rojo” conllevaba condena de muerte si se era apresado en los sectores controlados por los fascistas. Luego de la derrota republicana, tal señalamiento las más veces conducía a la muerte, la tortura, la cárcel, y quienes lograban escapar la salida era el exilio. “Rojo”, republicano, “facho”, entre muchas, viajan por el mundo, en medio de consignas, canciones, poemas. Una de las categorías más negativas y despreciables fue la de quintacolumna por el papel que jugó en favor del fascismo.

En nuestro caso, en la experiencia venezolana reciente, en estos tiempos de confusión creada por el chavismo -caldo de cultivo para propiciar este espíritu abyecto- el gobierno chavista ha estado desarrollando una política cuyo objetivo es precisamente crear una quintacolumna dentro de la oposición. Los llamados saltos de talanquera forman parte de esta política siendo su preámbulo la labor de zapa contra las fuerzas democráticas, creando confusión, sembrando escepticismo.

Indiscutiblemente algunas de las falencias políticas de la oposición contribuyen a que algunas de estas gentes justifiquen su labor, y a partir de aquéllas van a elaborar ideas y políticas inscritas dentro de la estrategia chavista. O, bien, dividiendo las fuerzas opositoras, como se expresa en el municipio Libertador.

Además, la prepotencia chavista, el uso de las instituciones del Estado en función de “contribuir” con quienes se inscriben dentro de esta política, hace aún más deleznable esta determinación de la política. Esto es, el chavismo pone recursos diversos al servicio de quienes asumen la felonía como política, desde dineros del Estado hasta instituciones como el Tribunal Supremo de Justicia.

La quintacolumna excretada de las filas de Bandera Roja ha jugado un papel nada despreciable. Contribuye con la confusión reinante. Como aspiraban los fascistas españoles: siembran especies para desmoralizar. Por ello se presentan como de oposición, pero planteando “alternativas” unitarias “nuevas”. Incluso, hablan con gente del partido y les manifiestan sus posiciones en favor de la salida democrática y en contra del oficialismo, mientras cumplen orientaciones que claramente favorecen al régimen despótico, en tanto que dispersan las fuerzas.

Aparte de esto, los quintacolumnistas no pierden oportunidad para propagar vilipendios contra dirigentes del partido sin sustento alguno que no sean sentimientos de odio y revancha. Ellos saben que debilitar una vanguardia de los trabajadores atenta contra un aspecto esencial de la política desde la perspectiva popular y revolucionaria. Cuestión que es de las que más favorecen al régimen despótico imperante en Venezuela y a quienes propugnan salidas continuistas en el sentido de mantener el actual esquema en la distribución de la riqueza.

La quintacolumna, de otra parte -nutriéndose de elementos inestables-, asume por momentos el discurso más extremista para atraer alguna que otra voluntad. Razones suficientes que permiten entender una problemática que encuentra terreno fértil en la descomposición ética y política de un grupo de personas que se han apartado del camino revolucionario. Que buscan algún espacio donde realizar aspiraciones que nada tienen que ver con el interés popular y nacional, ni con la perspectiva revolucionaria de los trabajadores venezolanos.

Teniendo su origen en la España revolucionaria y republicana, que sufrió de la acción de la quintacolumna franquista, hoy se repite la historia, tal vez, como dijera Marx, como comedia, dado que sus efectos -y lo decimos con mucha convicción- serán anulados por la firme respuesta de todo el colectivo de Bandera Roja y sólo quedarán como un episodio rayano en el ridículo.


19 de septiembre de 2013

RITUALES SATÁNICOS DE HUGO CHÁVEZ

Fuente: Soberania.org

El maligno quiere el alma de Hugo. La contrariedad parece ser su signo.

El periodista Nelson Boccaranda cita hoy 19/09/2013 en su popular columna de opinión Run Runes, publicada en el diario El Universal, un extracto del libro titulado: “2002, El año que vivimos en las calles”, cuya autoría es de su colega Alfonso Molina, quien entrevista a Carlos Ortega, ex presidente de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), figura estelar estrechamente vinculada a los hechos que desembocaron en el golpe de Estado del 11 de abril de 2002contra Hugo Chávez. Ante el comentario que Molina hace a Ortega: “Se dice que Chávez  llegó a extremos insospechados”, el veterano sindicalista -hoy exiliado y casi olvidado en Perú- responde:
“Voy a contar una anécdota que sabe muy poca gente: en una oportunidad recibí la llamada de una amiga, que aún forma parte del régimen, muy amiga de Chávez, amistad que no sé si aún se conserva. Me dijo que necesitaba hablar conmigo y nos reunimos fuera de Caracas. Me contó que había acompañado a Chávez a su gira a Sudáfrica, antes del paro, y que también fueron a Mozambique. Allí, en un ritual santero, de brujería, Chávez había enterrado una foto mía. Me aseguró que ella le reclamó el asunto y eso motivó que abandonara la gira y regresara a Venezuela. De verdad que no dudé de esta historia porque, además de que quien me lo estaba diciendo era mi amiga, es sabido que el caudillo es un gran creyente de esas cosas. Se dice que hace brujería y sacrifica animales y todo eso. Lo curioso es que pasaron los años y ya encontrándome aquí, en Lima, una tarde mi cuñado me envía un link y me dice: ‘lee lo que sale allí’. Se trataba de una página sobre ritos y brujerías en Venezuela y mi sorpresa fue mayúscula cuando leí lo que me había contado esta amiga, pero muchísimo más detallado. Allí se leía que durante esa gira a Suráfrica, en efecto Chávez fue a Mozambique y en determinado lugar, cubierto de huesos y completamente desnudo, cavó una fosa y junto con babalaos y sacerdotes de magia negra y vudú, comenzó a decir conjuras mientras colocaba una vasija con pócimas dentro de la fosa. En esa vasija puso una foto mía grande boca abajo, la cual cubrió con vísceras humanas, atravesándola luego con un costillar humano. (…). Puedes buscar el escrito ‘Rumores esotéricos del Presidente’ para que leas esto completo”.
Debido al indudable interés que el mencionado escrito: “Rumores esotéricos del Presidente” comenzará a tener, a continuación lo publicamos en su totalidad, no sin antes advertir que durante años este material ha sido ampliamente divulgado en Internet sin que hasta la fecha se conozca su autor, la fecha de publicación (¿2007?) y el sitio web del cual procede. Curiosamente es ahora Carlos Ortega quien con su anécdota le aporta al escrito cierta credibilidad.
“Rumores esotéricos del Presidente”
Prontuario Ritualístico
Asociación progresiva entre un gobernante bautizado y el maligno…
La Vírgen Santísima protege a Teófilo y de manera combativa blande contra el demonio, vencido y apavorado, Su gladio cruciforme. (tímpano de la Catedral de Notre Dame de París, siglo XIII).
Hugo Rafael Chávez Frías, bautizado cristiano, hijo rural de la democracia cristiana de América, quien muestra evidencias de haber desviado su vocación original; por su destructivo apasionamiento por saciar una enorme tentación de orgullo, ha sido llevado, paso a paso, a mayores compromisos con el maligno, con sus pompas y sus obras. Todo el equipaje de empeños y compromisos desenfrenados con los errores del maligno, se percibe en su cada vez más profundo prontuario ritualístico asociado a las fuerzas de la oscuridad.
¿Auténtica mística o mera superstición? No somos nosotros quienes lo van a dictaminar, pero lo cierto es que -enVenezuela- constituye un grave error empeñarse en luchar de manera contumaz y orgullosa contra los bondadosísimos propósitos de Una Mujer que a través de Sus súplicas es OmnipotenteDueña y Señora de esta tierra, y que incluso, a Hugo tanto ama.
Continuas consultas en y desde La Habana
Desde su visita a Cuba en 1994, Hugo Chávez logró entrar en contacto directo con importantes logias rituales de magos paleros de organización internacional. Esto le presentó una nueva dimensión ante sus ojos, e impresionado por los temas y recursos de conjura, y así, una vez más, nuevamente una parte sustancial de su alma quedó prendada de ese mundo. Es así, como Hugo Chávez entra en cotidiano “comercio” espiritual con babalawos de gran influencia política internacionalizada. Antes Hugo no pasaba de consultas de videntes, astrólogos, místicos, tarotistas y “canales” deSorte, espiritismo para conectarse con la figura del Simón Bolívar, mezclado ello todo caóticamente con las iniciales consejas de sacerdotes de la Iglesia Católica de amistad familiar.
A partir de 1994, La Habana junto a paleros y el Lukumí, logra deliberadamente establecer lo que sería más tarde (1998) una influencia espiritual permanente -paralela a la dependencia política- sobre la débil psicología del pacienteHugo Rafael. Es así que Hugo, ya presidente en 1999, tras intentar camelar a la masonería venezolana con el transporte de los restos mortales del ex-presidente Guzmán Blanco, comienza a viajar a Cuba clandestinamente a consulta con paleros y babalawos de una Orden en la cual ya estaba “debidamente” iniciado. No fue casual la primera y célebre declaración lanzada por Hugo Chávez desde La Habana contra la Iglesia Católica. Posteriormente es sugerido y solicitado el traslado a Venezuela de sus consultores esotéricos, así como la presencia permanente de estos en el país para el “servicio” de otros muchos oficiales militares y personalidades “proclives a la revolución”. En esta etapa, como adulante anfitrión estuvo el presidente del Banco Central de Venezuela, el supersticioso Diego Luís Castellanos, entre otros oficiales que se hicieron fanáticos de la iniciación afrocubana Lukumí.
Enemistad entre la Mujer y la serpiente
Es a partir de la época constituyente que las logias de magia negra y voodú, a las que ya Hugo Chávez va perteneciendo de forma cada vez más profunda, le sugieren la inminencia de una guerra espiritual contra la fuerte influencia de unaMujer en Venezuela. ¿Cuál sería esa Mujer? Pues, se trataba de aquella Mujer que estuvo asociada con la resolución del Ministerio de Educación para ser eliminada Su presencia de todas las aulas educativas y deportivas del país: La Virgen de Coromoto. Es así que, la gobernadora de Portuguesa llega a decir: “Quítenme esa muñequita de todas partes, pues ya el Ministerio dictaminó que su presencia aliena a los educandos”, y el evangélico gobernador de Táchira aplicó violentamente la retirada de la imagen de todas las escuelas públicas, a la par que el gobernador de Mérida hizo lo propio hasta en los institutos de salud, con agresiones constantes de todo tipo contra el episcopado, sus institutos de caridad y la Iglesia Católica regional..
Pero esta enemistad entre el nuevo acólito de la magia negra y la Mujer, no es nueva. El maligno tentador ha venido trabajando el alma de Hugo Chávez desde su tierna infancia. En fértil intuito venezolano, no sólo ha reconocido en Hugouna animadverción hacia la figura femenina, sino que incluso ha podido leerle en sus pasiones una animadversación a la maternidad misma. Esto ha traído como efecto, todos los comentarios hechos alrededor de una conflictiva relación con su madre, la Sra. Elena, con Marisabel Rodríguez, con la mujeres de Venezuela y con todas las denominaciones del género femenino y hasta con Rosinés. Intentando disfrazar esta animadversación sólo con los relatos sobre su misteriosa abuela Inés, única mujer con la que parece haber vivido en su vida. Hugo detestó dramáticamente la intuición del género femenino, y sus actos de violencia siempre han estado asociados a lo tangible de sus resentimientos, odios, traumas, complejos de culpa e inferioridad. De ahí, su cada vez más intrincada asociación con la serpiente. Serpiente que lo tienta, lo “trabaja”, lo atormenta y lo previene contra la Mujer, y a la vez lo complace y lo “sacía” con mayores pasiones de orgullo.
Intentando romper lazos entre cielo y tierra
Desde que Hugo Chávez, en 1999, emitió su agresión de La Habana contra la Iglesia Católica, no ha cesado de emitir odios, rabias y viejos resentimientos contra la Iglesia y sus instituciones: Adecos ensotados, el demonio debajo de la sotana, tumor de la historia, los apóstoles no son Cristo, fariseos hipócritas, esta es una lucha entre Dios y Satanás, etc. Chávez tanto manosea la Constitución que viola e incumple, como el crucifijo, que también viola e incumple. Esto denota una obsesión por querer ser asociado y fusionado a la forma de ambos emblemas, pero no a sus esencias, contrariando profundamente la esencia de los mencionados emblemas. Pero una de las afirmaciones más relevantes de este secuaz de la magia negra, fue cuando tras declarar que la Iglesia Católica era el tumor de la historia, él mismo se calificó de “cristiano evangélico”, en uno de los episodios más dramáticos por intentar separar a Jesús de suVicaría en la tierra: el Papado y sus ministros. Sustancial coincidencia con los enemigos de los lazos entre el cielo y la tierra.
Mozambique y el Paro
Para la asamblea internacional cumbre de la FAO, en Suráfrica, que contaría con la presencia del Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan. El presidente Chávez anunció su comparecencia, junto a una nutrida comisión de ministros y embajadores, con bombos y platillos. Tras el evento y una vez de regreso a Venezuela, Hugo Chávez criticó la asamblea, la llamó de simple cumbre que va de cumbre en cumbre, e hizo referencia al muy crítico discurso por él pronunciado durante el evento. ¿Qué ocurrió? Ocurrió que, la verdadera intención de Hugo Chávez no era hacer presencia en la asamblea, sino que utilizó el evento de la FAO en Suráfrica para disimular su verdadero destino:Mozambique.
¿Por qué Mozambique? Porque Chávez fue conminado por las logias esotéricas cubanas, a elaborar una fuerte conjura ritual de magia negra con altos jerarcas de la brujería del África rural. Los paleros cubanos de Chávez reconocieron un gran peligro, que se posaba sobre la figura de la revolución “bolivariana”, a partir de un Paro Nacional -fuera de lo ordinario- que sería clave de amenaza. Había que evitarlo, desvirtuarlo como sea, rechazarlo con conjuras a favor de los espíritus de la magia negra, había que hacer todo lo posible por conseguir el fracaso de ese Paro potencial.
Para ello, ya todo estaba coordinado por las comisiones esotéricas y hasta con personalidades de los tres gobiernos (Cuba, Mozambique y Venezuela). En reducido comité, Chávez viaja en persona hasta Mozambique (sólo para hacer el ritual), se adentran en lo más profundo del territorio mozambiqueño y al encontrarse con los místicos rurales de la magia negra o alto voodú de Mozambique, hubo conversación por horas entre los babalawos cubanos y los africanos sin la presencia de Chávez. Durante la noche Hugo Chávez, ataviado con tiras y huesos en los brazos y completamente desnudo, entra en ritual y él mismo -delante de todos y durante más de una hora- cava una fosa profunda en tierra, fosa de poco diámetro, donde luego, él junto a tres místicos africanos (uno principal y dos asistentes) depositan en el fondo de la fosa una especie de vasija con pócimas (preparadas por los africanos) y colocan dentro una fotografía grande deCarlos Ortega colocada al revés. Esto fue tapado por una gran cantidad de vísceras descompuestas (presumiblemente humanas) y luego, todo ello, encerrado por un costillar completo, claramente humano, que fue clavado en la tierra encima de la vasija a manera de celda.
Tras esto el mismo Hugo Chávez comenzó a echar tierra encima de todo ello mientras los africanos oraban conjuras y junto a Hugo Chávez iban apelmazando la tierra. Así pasaron casi tres horas dentro de la fosa echando tierra, bebiendo, orinando y murmurando conjuras.
En alta mar, previsión a la muerte del espíritu
Uno de los más compremetedores ritos de brujería voodú, llevados a cabo por Hugo Chávez, después del 11 de abril. Se trató de un rito que exigió el uso de un gran despliegue “logístico”. Por ello, el rito fue conocido por algunas personas, sobretodo dentro de la oficialidad de la Armada. Los babalawos de pacto con Hugo Chávez, exigieron prevenir un vislumbrado “asesinato del espíritu” del protegido de la revolución. Los babalawos estaban convencidos que a Chávez lo querían “matar”, pero no era la muerte física lo que más corría peligro, era la muerte de su espíritu. Espíritu suyo que con tanta salud y fuerza mística nutría a “una revolución en América”. Una gran enemiga de la revolución “quería voltear la inversión del espíritu vocacional de Chávez”. Para esto, había que ayudar a su debilitada serpiente protectora. ¿Cómo?
Se trasladó a los paleros cubanos junto a un medium venezolano (hombre-materia de trance) a Isla de Aves, en una gran unidad de la Armada y Hugo Chávez posó luego en un helicóptero. Tras esto, en una gran lancha, se trasladaron a lo más profundo de alta mar Hugo Chávez, un babalawo principal, el “medium” venezolano, una plataforma pequeña, un ataúd y numerosos implementos. Posteriormente, ya en alta mar, era peligroso el oleaje pero se colocó sobre la plataforma flotante, los implementos y el ataúd, luego posaron sobre la plataforma Chávez, vestido de traje y corbata rojos, el babalawo y el venezolano, nadie más. La lancha los abandonó totalmente en mitad del mar y comenzaron los ritos, sólo el helicóptero sobrevoló, una sola vez y a mucha distancia de la plataforma, para no perderlos de vista.
Luego que la lancha los recogió de nuevo y una vez en la Isla de Aves, el mismo Hugo Chávez, jocosamente, le comentó a oficiales de la Armada allí presentes que el tuvo que estar metido dentro del ataúd y tapado durante la mayor parte de la ceremonia, pero que sintió mucha paz y dijo: “ahora si estoy tranquilo.”
Sangre imperial
Tras los sucesos del 11 de abril de 2002, los ritos y pactos de Chávez fueron sufriendo una metamorfosis hacia unas conjuras paganas de carácter predominantemente mediterráneo. Vigorizar los pactos, en honor a los ídolos y demonios de la Roma pagana, entran por necesidad en escena. Es así como la logia esotérica cubana sugiere ahora dos cosas: sacrificio máximo y sangre imperial. Todo fue preparado para una medianoche, en honor a demonios bélicos y sedientos de sangre. En un sótano de Miraflores, los magos del voodú preparan inciensos y el sacrificio de un león enjaulado, Chávez se bañó completamente con la sangre de la bestia. Con esa sangre, Chávez “adquiriría” así la agresividad leonina contra los mártires contrarrevolucionarios, su credibilidad de acometimiento, su imposición y su imperio. Fue un traspaso de salud: de la bestia al gobernante (modalidades de esta práctica demoníaca es habitual en el jefe de la revolución cubana). Esto fue realizado para precipitar gravedades en lo nacional, ganar respeto a sus exigencias y fijar un nuevo compromiso más profundo de Hugo Chávez con fuerzas aun más oscuras. Incienso fue ofrecido a los demonios paganos.
Las cuatro esquinas de Venezuela
Durante el año 2002, los babalawos de pacto con Chávez comenzaron a sentir un despertar insólito en la conciencia de la población venezolana, la intuición de las masas se agudizaba y producía una inédita coordinación silenciosa entre los venezolanos, impetuosamente se registraba una especie de telepatía entre la gente que lograba un místico engranaje de inspiración contra el esquema revolucionario y la maldad, parecía una inducción providencial, era un auténtico vox populi. Este fenómeno no podía ser permitido, era la muerte del espíritu de Hugo, por lo cual la revolución “bolivariana” debería asumir un nuevo compromiso con las fuerzas de la oscuridad y tratar de frenar semejante inducción providencial. La magia negra revolucionaria, trató de someter la conjunción del vox populi en Venezuela. Para ello los babalawos prepararon un conjunto de pócimas de maldición “espiritual” que fueron arrojadas desde un avión sobre las cuatro esquinas de Venezuela, desde el este al oeste y del sur al norte. En este rito, llevado a cabo en un mismo día, estuvieron presentes en el avión Hugo Chávez y el grupo de babalawos de su logia diabólica.
Mártires cristianos: Sacrificio máximo
En coherencia con los nuevos compromisos paganos, asumidos tras el 11 de abril, los “sacerdotes” del voodú chavista, acogen uno de los más comprometedores actos maléficos de la historia, ritual de perdición. Consiste este, en ofrecer en sacrificio la sangre humana de tus adversos. Los romanos paganos ofrecían a los ídolos, incienso y sangre de cristianos, al ser devorados estos por las bestias. Era un espectáculo maldito que otorgaba virilidad y fuerza mística a los asistentes que se enajenaban de pasión al dar asentimiento emocional a su violencia y estar presentes. Estos ritos paganos, sincretizados hoy con el voodú, son diametralmente opuestos a la máxima cristiana de la caridad a través de la procura de la salvación del alma del prójimo. Ofrecer la muerte producida en el adversario, cumple dos propósitos satánicos fundamentales: procurar la perdición del alma del prójimo y ganar el favor de las fuerzas del maligno mediante el ofrecimiento de su sangre vertida. La revolución de Chávez ya se ha adentrado en esta práctica maldita y con ello busca ganar “vigor espiritual” para sus orgullosos y oscuros propósitos, asesinando y ofreciendo la sangre de sus propias víctimas, en contubernio con los demonios. Es voodú máximo, es magia negra de la más profunda, pues la conciencia de su oferente conoce su reversibilidad.
Contra la letra de Ifá
Durante enero de 2003, mucha polémica se levantó dentro del oscuro mundo esotérico que sostiene al régimen venezolano. El oráculo de los orishás y babalawos de la santería, para el año 2003, determinó la irrecuperabilidad del régimen revolucionario chavista. Este pronóstico místico desintegró los diferentes designios que aun discretamente se manipulan dentro del mundo político-esotérico entre el chavismo y el castrismo. Los propósitos del castrismo se revelan contrarios o diferentes al del chavismo. La intervención providencial, contraria a las fuerzas de la oscuridad, ejerce su Potestad y determinaron así una disyuntiva de miras entre ambos mundos y propósitos. Se separan ocultamente los propósitos de las logias esotéricas cubanas y el propósito personal de Hugo ChávezHugo Chávez no lo sabe, no lo quiere saber, sigue buscando desesperado en oráculos esotéricos afroamericanos y mediterráneos, pero no lo logra. Los ritos actuales son espantosos, lo engañan todos, especialmente los cubanos. El maligno quiere el alma de Hugo. La contrariedad parece ser su signo.
Celtibérico traspaso de salud
El padre de toda esta criatura maldita, no es otro que el anciano gallego Fidel Castro Ruz. A pesar de tanta propaganda emitida por la inteligencia comunista cubana para esconder los nexos de Castro con la santería de magia negra, elLukumí y el voodú de los paleros, Castro se ha asociado y ha practicado no sólo la magia negra con propósitos de influencia política y espiritual, sino en prácticas rituales de brujería sincrética mediterránea de origen celtibérico. Una de las más usuales en Castro ha sido el “Traspaso de Salud”. El traspaso de salud, bien sea salud física, salud económica, salud política o de dotación natural, consiste en un perverso pacto de ofrecimiento en sacrificio a uno de tus influenciados y su salud, para que el oferente disfrute de la salud que el sacrificado poseía. Son ritos de voodó sincretizado con la brujería celtibérica de los cuatro elementos.
Castro aplicó estos espantosos ritos cuando sentenció oculta y personalmente a la pena máxima a Ochoa, oficial destacado en las intervenciones comunistas de militares cubanos en África. Para ello, Castro ofreció ritualmente la sangre de Ochoa a cambio de obtener la “salud” del liderazgo interno y la salud física de Ochoa, al estar Castrosufriendo una fulminante afección hepática y de política interior. Fue un “Traspaso de Salud.” Lo mismo ha sido considerado en círculos esotéricos, frente a sus actuaciones ante las “desapariciones” de símbolos revolucionarios como los de Ernesto Guevara, Camilo Cienfuegos y Salvador Allende, entre otras muchas. Muchas que quizá no sean las últimas.
Voluntad de auto-sacrificio: Oferta indespreciable
Siempre, siempre presente aquél empeño de Hugo Chávez de asumir el modelo de Allende, como si el modelo de Allende o del guerrillero Ernesto Guevara, no fueran sólo un pésimo modelo, sino un arquetipo. Pero misterioso arquetipo que peligrosamente es inseparable de su destino. En esto, no ocurre lo que ocurre con el manoseo de laConstitución, es decir, manosearla pero sin asumir el cumplimiento su fondo. Querer asumir su forma sin asumir su esencia. No. Querer ser Allende, también es asumir el destino de Allende, no sólo usufructuar las revolucionarias páginas de su historia. Cuando se asume a Allende o a Guevara, se establece un perverso auto-sacrificio. Es un rito, y ese rito nutre una oferta continuamente. Es así como Chávez se adentra -cada vez menos inadvertidamente- en un mundo oscuro y perverso que él cree conocer.
Quizá a esta altura, ya Hugo sospecha que el demonio no da lo que promete. Pero él sigue prendado, obsesivo y fanático en un drama que de psicológico ya pasó a místico. Aquí Chávez ofuscado se ofrece él mismo… ¿Con la esperanza de que la oferta no sea aceptada? No sabemos. Quizá tenga en lo profundo una esperanza nimia de que su oferta sea despreciada, pero lo que sí podemos presumir es que ya es casi consustancial a su espíritu una cobardía que lo desborda, y hasta esto puede jugar un papel positivo cuando lo que se teme es el dictamen divino. Sin embargo, cuando los niveles de compromiso con el maligno, sus ritos, sus pactos y sus obras, alcanzan ciertas circunstancias y efectos característicos, para el maligno la oferta ya no sólo es indespreciable, sino que constituye lo que sería un empeño contumaz y diabólico.”


CÓMO LOS DICTADORES LLEGAN AL PODER EN UNA DEMOCRACIA

Por: Jim Powell

¿Por qué, entonces, los alemanes educados acogieron a un lunático como Adolf Hitler?

Las dictaduras son a menudo inesperadas. Han surgido en pueblos prósperos, educados y sofisticados que parecían estar lejos de llegar a una dictadura —en Europa, Asia y Sudamérica. Consideren a Alemania, uno de los casos más paradójicos y dramáticos.
Durante fines del siglo diecinueve, muchos consideraban que tenía el mejor sistema educativo del mundo. Si cualquier sistema educativo pudiese vacunar a un pueblo en contra de la barbarie, seguramente el sistema alemán hubiese liderado el camino. Tenía educación para la infancia temprana —jardines de infancia. Las escuelas secundarias enfatizaban el entrenamiento cultural. Los alemanes desarrollaron las universidades modernas de investigación. Los alemanes se distinguían particularmente por sus logros en las ciencias —solo considere a Karl Benz que inventó el auto que funciona a base de gasolina, Rudolf Diesel que inventó el motor de compresión-ignición, Heinrich Hertz que comprobó la existencia de las ondas electromagnéticas, Wilhelm Conrad Rőntgen que inventó los rayos X, Friedrich August Kekulé que desarrolló la teoría de la estructura química, Paul Ehrlich que produjo el primer tratamiento médico para la sífilis y, por supuesto, no hay que dejar de mencionar al teórico de la física Albert Einstein. No debería sorprender que muchos académicos estadounidenses fueron a universidades alemanas para obtener sus títulos durante el siglo diecinueve.
Luego de la Primera Guerra Mundial, el enrolamiento en las universidades alemanas se disparó. Para 1931, llegó a 120.000 en comparación con un máximo de 73.000 antes de la guerra. El gobierno proveía becas completas para los estudiantes pobres que demostraban habilidades. Como lo reportó un cronista, un estudiante becado “no paga pensión en la universidad, sus libros de texto son gratis y en gran parte de las compras que hace, de ropa, tratamientos médicos, transporte y tiquetes para teatros y conciertos, recibe descuentos sustanciales, y un estudiante puede obtener suficiente comida saludable para mantener su cuerpo y su alma”.
Mientras que hubo algo de agitación anti-semita en Alemania durante fines del siglo diecinueve, Alemania no parecía ser el lugar más propicio para que este sentimiento aflore. Rusia, después de todo, tuvo pogromos —disturbios anti-semitas y persecución de judíos— por décadas. El régimen bolchevique se dedicaba así mismo al odio —el odio de Karl Marx de la “burguesía” a la cual culpaba de los males de la sociedad. Lenin y su sucesor Stalin empujaron más allá esa filosofía, exterminando a los denominados “ricos”, categoría dentro de la cual se llegó a incluir a los campesinos con una vaca.
¿Por qué, entonces, los alemanes educados acogieron a un lunático como Adolf Hitler? La respuesta breve es que las malas políticas causaron crisis económicas, militares y políticas —el caldo de cultivo perfecto para los tiranos. Las circunstancias alemanas cambiaron para peor, y cuando la gente se vuelve suficientemente enfadada o desesperada, a veces respaldarán locos que nunca atraerían a una multitud en circunstancias normales.
Como otros beligerantes, los alemanes habían entrado a la Primera Guerra Mundial con la expectativa de que ganarían y recuperarían los costos de la guerra haciendo que los perdedores pagaran. El gobierno alemán le hizo creer a la gente que estaban ganando, entonces todos estuvieron sorprendidos cuando la verdad salió a la luz. El entonces presidente de EE.UU. Woodrow Wilson dio un discurso explicando sus altruistas “14 puntos”, derivando en que los alemanes creyeran que habría una negociación de paz. Pero los ingleses y los alemanes —los principales aliados de EE.UU.— estaban determinados a vengar sus pérdidas, y términos rencorosos fueron impuestos a los alemanes. Se sintieron traicionados y humillados. Los principales comandantes militares de Alemania se dieron cuenta de que quien sea que firme el armisticio sería odiado, así que renunciaron y dejaron que un funcionario civil lo firmara (este luego fue asesinado). Como resultado, la República de Weimar, la frágil democracia alemana, fue inmediatamente desacreditada.
Hitler estaba entre esos que se manifestaban en contra del gobierno de Weimar. Se unió al Partido de Trabajadores que, en febrero de 1920, se convirtió en el Partido Nacional Socialista de Trabajadores (NSDAP, por sus siglas en alemán)— nombre que luego fue abreviado a Nazi. Este partido ofrecía un coctel de nacionalismo, socialismo, anti-semitismo y anti-capitalismo. El historiador alemán Oswald Spengler influyó a los primeros Nazis con su idea del “socialismo prusiano”.
El principal talento de Hitler parecía ser la de componer discursos, así que empezó a dar discursos que agradaban a los alemanes resentidos y desilusionados con el resultado de la guerra. Denunció a los judíos, a los capitalistas y a otros supuestos villanos, prometiendo reconstruir la grandeza de Alemania. El historiador Ian Kershaw observó que “Sin una guerra perdida, sin una revolución y sin un sentido predominante de humillación nacional, Hitler hubiese seguido siendo un don nadie”.
Luego vino la crisis con la inflación. Los aliados triunfantes exigieron que Alemania pagara unas onerosas reparaciones, aparentemente sin reparar mucho en cómo los alemanes obtendrían el dinero para pagarlas. Las restricciones comerciales hicieron que fuera más difícil para las empresas alemanas ganar dinero mediante las exportaciones. Los aranceles europeos se triplicaron y eran de un nivel de hasta 800% más alto que antes de la guerra.
El gobierno alemán declaró el incumplimiento del acuerdo de reparaciones. Determinado a extraer las reparaciones de los alemanes, en enero de 1923 los franceses enviaron tropas hacia la zona de Ruhr, donde se encontraban la mayoría de las industrias alemanas. El gobierno alemán respondió subsidiando a aquellos que participaban de una resistencia pasiva en contra de los franceses. Consecuentemente, los déficits en el presupuesto alemán se dispararon.
Por sí solas, las reparaciones hubiesen sido desalentadoras, pero Alemania también tenía un Estado de bienestar en problemas financieros. Casi 90 por ciento del gasto público del gobierno alemán se destinaba a una burocracia enorme, programas sociales, empresas estatales que generaban pérdidas y otros subsidios —una lista de obligaciones incómodamente familiar para nosotros. El gobierno alemán subsidió a los municipios, muy similar a la manera en que los estados de EE.UU. le están rogando al gobierno federal que los rescate. Alemania tenía un sistema estatal de pensiones en problemas, al igual que nuestro sistema del Seguro Social. El gobierno alemán proveía seguro de salud para millones de personas. Habían programas estatales para 1,5 millones de veteranos de guerra discapacitados. El gobierno destinaba cuantiosos subsidios a las artes. Habían teatros y óperas estatales. Los ferrocarriles estatales perdían dinero. El gobierno alemán incluso operaba fábricas que producían margarina y salchichas, las cuales perdían dinero.
El banco central alemán empezó a imprimir cantidades estupendas de dinero de papel para pagar todo esto. En el pico de la inflación a fines de 1923, solo 1,3 por ciento del gasto público alemán estaba cubierto por la recaudación fiscal. El resultado fue que en menos de cinco años los precios se dispararon por un factor de 100 mil millones.
La inflación perjudicó a todos de una forma u otra. Muchos depósitos bancarios fueron devaluados hasta llegar a ser nada. El historiador Gerald D. Feldman reportó que pandillas de mineros de carbón desempleados saqueaban el campo, porque los agricultores se negaban a vender sus productos por dinero de papel sin valor. El gobierno implementó controles de renta que limitaron la capacidad de los propietarios de recuperar sus costos y desalentó a los promotores inmobiliarios de construir más departamentos. Luego los gobiernos de las ciudades pidieron prestado de prestamistas extranjeros para construir viviendas que perdían dinero. Las librerías y los museos no podían mantener sus colecciones debido a la inflación. Gran parte de las investigaciones científicas se volvieron imposibles de financiar también.
El historiador Konrad Heiden reportó “En las tardes de los días viernes en 1923, largas líneas de trabajadores manuales y de cuello blanco esperaban afuera de las ventanas de pago de las fábricas, los grandes almacenes, los bancos y las oficinas. Cada uno recibía una funda llena de papeles. De acuerdo a las cifras inscritas en ellos, los papeles equivalían a setecientos mil quinientos millones, o trescientos ochenta mil millones, o dieciocho billones de marcos —las cifras subían de mes a mes, luego de semana a semana, finalmente de día a día. La gente corría a las tiendas más cercanas de comida donde las líneas ya se habían formado. Cuando llegaban a las tiendas, una libra de azúcar, por ejemplo, podría haberse comprado con dos millones de marcos; pero para cuando llegaban a la caja todo lo que podían comprar con dos millones de marcos era media libra. Todos buscaban cosas que durarían hasta el próximo día de pago”.
Las personas empleadas en el sector privado se enfurecieron cuando los empleados públicos organizados en sindicatos —quienes implementaban las desastrosas políticas económicas del gobierno— lograron que sus salarios fuesen pre-pagados, de tal manera que pudieran convertir la moneda en bienes antes de que esta se depreciara más. La publicación Soziale Praxis reportó: “Nos parece significativo que la opinión pública ahora esté gradualmente volcándose en contra del servicio civil a tal grado que provoca una gran preocupación. Cuánta hostilidad es dirigida a diario en contra de esa porción del pueblo alemán con empleo y con estatus de servicio civil es mostrado por la prensa e incluso por esas partes que anteriormente respaldaban al servicio civil y ahora presionan por una reducción del servicio civil”.
Hitler dio discursos tratando de congraciarse con los que él denominó “billonarios muertos de hambre”, quienes tenían miles de millones de marcos en papel pero no podían comprarse un pan de molde. En conjunto, durante la inflación, Hitler reclutó alrededor de 50.000 Nazis y se volvió una fuerza política digna de reconocimiento. El economista Constantino Bresciani-Turroni denominó a Hitler “el niño acogido por la inflación”. Es cierto que intentó un golpe de estado que fracasó (8 de noviembre de 1923) y que fue encarcelado. Pero retuvo el encanto sobre sus seguidores y escribió sus venenosas memorias en Mi batalla, libro que se convirtió en la biblia Nazi. Durante fines de la década de 1920, la economía alemana empezó a recuperarse y hubo menos interés en los Nazis. En las elecciones para la legislatura de 1928, ganaron solamente 2,6% del voto. Si los buenos tiempos hubiesen continuado, Hitler podría haber sido olvidado. Él necesitaba otra crisis para tener una oportunidad de ganar poder político.
La crisis vino en la forma de una sucesión de políticas mal concebidas que crearon obstáculos al emprendimiento y provocaron la Gran Depresión. El gobierno promovió la deflación. Fijó precios a niveles que estaban por encima del mercado y desalentaban a los consumidores de comprar, y fijó salarios a niveles que estaban por encima del mercado y desalentaban a los empleadores de contratar trabajadores. Los carteles aprobados por el gobierno restringieron la competencia. Los impuestos altos dificultaron que la gente ahorrara e invirtiera. Los aranceles altos obstaculizaron el comercio. Cuando los productores alemanes fueron capaces de exportar productos, tuvieron dificultades obteniendo el pago correspondiente debido a los controles de tipo de cambio. Todas estas políticas dificultaron el crecimiento de la economía.
Además, los bancos alemanes estaban en una posición vulnerable, dado que ellos no se habían recuperado completamente de la inflación que había licuado una porción sustancial de su capital y los había dejado dependientes de los depósitos extranjeros a corto plazo, que podían ser retirados. Conforme el número de desempleados aumentó, más alemanes votaron por los Nazis, y el número de miembros de los Nazis aumentó nuevamente. Quería destruir a sus opositores entonces los demonizó. Los acusó de ser traidores. Dos organizaciones Nazis paramilitares, la S.A. y la S.S., lanzaron ataques sangrientos contra sus opositores. Esto atrajo más rufianes a quienes les gustaba la violencia y eran buenos en infligirla. Cada noche, habían manifestaciones y marchas de los Nazis. Los partidarios de Hitler lo promovían publicando una revista Nazi, distribuyendo discos Nazis y promoviendo las películas Nazis.
Se convirtieron en la organización política más grande en Alemania, y para el 30 de enero de 1933, con la ayuda de un poco de chantaje, Hitler surgió como el canciller de Alemania —la cabeza del gobierno. Luego procedió a consolidar poderes ilimitados antes de que alguien se diera cuenta de lo que estaba pasando.
Deberíamos comprender que Hitler no llegó un gobierno limitado con una separación efectiva de poderes enumerados, delegados y restringidos. Él llegó a liderar un Estado de bienestar. Había sido creado por el autócrata Otto von Bismarck, se expandió rápidamente durante la Primera Guerra Mundial y ganó control total de la economía. Las empresas privadas relacionadas a la guerra fueron convertidas en burocracias estatales. El gobierno cerró empresas privadas que los funcionarios consideraban innecesarias. Hubo trabajo forzado y nadie podía cambiarse de trabajo sin permiso del Estado. Por primera vez, este “socialismo de guerra” mostró al mundo lo que una economía socialista sería, y se convirtió en un modelo para Lenin y otros teóricos comunistas. Los Aliados dirigieron el desmantelamiento de la máquina de guerra en Alemania, pero una economía estatizada sobrevivió en gran medida.
Aunque Hitler hacía eco de la planificación económica centralizada de la URSS con un plan de cuatro años, su método consistía de una regulación sofocante en lugar de la expropiación frontal. La propiedad privada existía nominalmente pero el Estado la controlaba. Abordó el desempleo introduciendo el trabajo forzado para hombres y mujeres. El control estatal de la economía hizo que fuera virtualmente imposible, para cualquiera, amenazar seriamente su régimen. Hitler agregó la policía secreta, los campos de concentración y otra máquina de guerra.
El sistema educativo alemán, que había inspirado a tantos progresistas estadounidenses, jugó un papel importante en todo esto. Durante el siglo anterior, el Estado obtuvo el control completo de las escuelas y las universidades y su principal prioridad era enseñar la obediencia. La élite docente promovió el colectivismo. El llamado más noble era trabajar para el gobierno. En 1919, el sociólogo Max Weber reportó que “El honor del servicio civil está en su habilidad de ejecutar conscientemente el orden de las autoridades superiores”.
Lecciones para nosotros:
§  Las políticas económicas y exteriores malas pueden causar crisis que tienen peligrosas consecuencias políticas.
§  Los políticos usualmente demandan poder arbitrario para lidiar con una emergencia nacional y restaurar el orden, aún cuando los problemas subyacentes generalmente son causados por malas políticas públicas.
§  En tiempos difíciles, muchas personas están dispuestas a respaldar cosas terribles que serían impensables en tiempos buenos.
§  Quienes descartan la posibilidad de un régimen dictatorial en EE.UU. necesitan considerar los desarrollos posibles que podrían empeorar nuestra situación y hacerla más volátil de lo que es ahora —como el gasto público descontrolado, los impuestos crecientes, más guerras, la inflación y el colapso económico.
§  Los aspirantes a dictadores algunas veces revelan sus intenciones mediante su deseo evidente de destruir a sus opositores.
§  No hay una manera confiable de prevenir que las personas malas o incompetentes obtengan poder.
§  Un sistema político con una separación de poderes, con pesos y contrapesos —como la Constitución de EE.UU.— si dificulta que una rama del Estado domine a las otras.

§  Finalmente, la libertad puede ser protegida solamente si a la gente le importa lo suficiente como para luchar por ella, porque en todas partes los gobiernos presionan por más poder y nunca renuncian a este voluntariamente.

DEMOCRACIA TOTALITARIA

Por: Carlos R Alvarado Griman
Fuente: Hispanos Report

“El imperio de la multitud no es menos tiránico que el de un hombre solo, y esta tiranía es tanto más cruel cuanto que no hay monstruo más terrible, que esa fiera que toma la forma y nombre del pueblo”- Marco Tulio Cicerón

En Venezuela hemos tenido la desagradable oportunidad de presenciar, en asiento de primera fila, el fenómeno de la llamada “Democracia Totalitaria” , el cual fuera descrito por pensadores de la talla de Hayek y Talmon, pero que hasta la llegada del Socialismo del Siglo XXI, no se había mostrado por estas latitudes, con toda su crudeza en la realidad. Muchos despistados cuando escuchan hablar del totalitarismo en Venezuela, exclaman: “Pero allá siempre están celebrando elecciones!”. Esto es cierto, pero esos procesos electorales amañados y avalados por el colaboracionismo “opositor”, es lo que permite a los autoritarios, mostrar al mundo una cara democrática, mientras suprime derechos fundamentales a los ciudadanos.

Las elecciones no son los elementos que definen si se vive o no dentro de un sistema democrático. Líderes de los regímenes totalitarios más sanguinarios como Hitler y Mussolini, ascendieron al poder por ese medio, pero luego sometieron a sus ciudadanos a férreas dictaduras e instauraron la figura del partido hegemónico para el control, regulación y conculcación de todas las libertades, haciendo del Estado y sus recursos un instrumento de sus proyectos políticos. En Venezuela el poder judicial venezolano, ha sido virtualmente secuestrado por una mafia que pregona la construcción del Socialismo del Siglo XXI. Montesquieu debió revolcarse en su tumba ante las expresiones de la ex-presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de ese país, Luisa Estela Morales quien abogó abiertamente por reformar la Carta Magna para suprimir el principio de división de los Poderes Públicos, por considerar que el mismo“debilita al Estado”.

En los sistemas de democracia totalitaria, el término “pueblo” es abusado, usado y movilizado en acciones plebiscitarias, para perpetuar a la élite en el poder, aduciendo el interés colectivo. Ese dios “pueblo” ahora es manipulado desde los inconstitucionales Consejos Comunales y fascistas milicias bolivarianas coordinadas por las llamadas Regiones Estratégicas de Defensa Integral, que borrarán del mapa a los organismos tradicionales de la democracia, más cercanos a la gente como lo son las alcaldías y concejalías.

El interés supremo del “pueblo” y el “Bien Común” siempre son invocados por los seudo demócratas para instaurar sus hegemonías, en todas y cada una de las actividades sociales. De esto no escapa nada. De hecho, invocando esos intereses difusos, se instauró en Venezuela la llamada hegemonía comunicacional, la cual secuestra el espectro radioeléctrico, suprime la prensa escrita y condiciona los contenidos audiovisuales, vulnerando los derechos de los individuos a la libre escogencia de los programas que los ciudadanos desean ver y oír.

Uno de los analistas políticos más avezados venezolanos, alguna vez dijo que algunos dirigentes necesitaban burdel político, debido a la falta de experimentación y excesiva inocencia para interactuar en las lides políticas de estos tiempos y para afrontar estos modelos engañosos y letales para la libertad. Los políticos deben comenzar a llamar las cosas por su nombre. Sin dudas el Socialismo del Siglo XXI no es otra cosa que la deformación aberrante de la democracia. Un esperpento engañoso, oxímoron trágico del tiempo en que se vive la política latinoamericana. Esto es:La DEMOCRACIA TOTALITARIA!